El precio del petróleo intermedio de Texas (WTI) abrió este miércoles con un alza del 0.13 %, hasta 39.85 dólares el barril, a la espera de los datos semanales de reservas de crudo que ofrece hoy el Gobierno de Estados Unidos y en medio del temor por una sofreoferta de crudo.
A las 09:05 hora local, los contratos futuros del WTI para entrega en noviembre, el nuevo mes de referencia, sumaban cinco centavos respecto a la sesión previa del martes.
El crudo de referencia estadounidense se movía cerca de la línea plana antes de que la Administración de Información Energética divulgara esta mañana los datos de las reservas nacionales.
El Instituto de Petróleo de EE.UU., una asociación industrial, estimó ayer un aumento en las reservas de crudo de 691,000 barriles en la semana terminada el 18 de septiembre.
Los expertos señalaban que un aumento sorpresa en las cifras oficiales puede ser suficiente para dar paso a otra etapa de bajadas en los precios del “oro negro”.
Por otra parte, los inversores siguen preocupados por el aumento de casos de COVID-19 y la posibilidad de que vuelvan las restricciones a la movilidad en Europa y EE.UU., con el consiguiente impacto en la demanda.
“Una subida en el petróleo puede ser como nadar contra la corriente a corto plazo, con un aumento de casos de COVID y restricciones probablemente pesando en la actividad económica y por tanto la demanda”, dijo en una nota el analista sénior de OANDA Craig Erlam.
Asimismo, presionaba a la baja el retorno de la producción libia al mercado, que los analistas cuantifican en unos 260,000 barriles diarios para la semana que viene, es decir, unos 150,000 más de lo que ha sido habitual en los últimos meses.