Washington County, Utah.- Tyler Robinson, de 22 años, acusado del asesinato agravado del activista conservador Charlie Kirk, se entregó voluntariamente a las autoridades de Utah por temor a ser abatido durante un operativo policial.
El sheriff del condado de Washington, Nate Brooksby, explicó que Robinson sabía que su captura era inminente tras la difusión de su fotografía en los medios y el hallazgo del rifle presuntamente utilizado en el ataque. “Tenía mucho miedo de que la Policía le disparara”, señaló el oficial.
Según las autoridades, la entrega se coordinó bajo condiciones especiales para garantizar la seguridad del detenido, luego de que sus padres lo convencieran con ayuda de un exsheriff amigo de la familia.
Los cargos y la posible condena
Robinson fue imputado el martes por asesinato con agravantes, un delito que, de acuerdo con la legislación de Utah, puede conllevar la pena de muerte. En el estado se contemplan dos métodos de ejecución: inyección letal o fusilamiento, a elección del condenado.
Además del cargo principal, enfrenta acusaciones por obstrucción de la justicia, manipulación de testigos, disparo de arma de fuego y cometer un acto violento en presencia de un menor.
El ataque contra Charlie Kirk
Charlie Kirk fue alcanzado en el cuello por un disparo el pasado 10 de septiembre durante una sesión de preguntas y respuestas con estudiantes en la Universidad del Valle de Utah. El tirador habría disparado desde el techo de un edificio cercano.
El FBI calificó el hecho como un “ataque selectivo” dirigido contra el activista, líder de la organización conservadora Turning Point USA.