
«Todo el mundo sabe que eso es posible, pero yo puedo asegurarles a ustedes, que yo no me prestaré nunca a apoyar ningún interés particular», indicó el magistrado.
Dijo que hasta ahora no ha visto ningún sesgo particular que trate de contaminar las decisiones del TC. “Hasta ahora, hasta ahora, pero si eso pasara señores… mis colegas verán las garras y no voy a guardar silencio, yo no voy a guardar silencio, porque este país no van a hipotecarlo y si los americanos quieren que me quiten la visa como se la han quitado a otros, que me la quiten como se la han quitado a otros», añadió el juez.
Al referirse a las presiones que suelen recibir los jueces, Vargas declaró que “cuando no los castiga la sociedad, entonces el poder extranjero les quita la visa. Y yo me pregunto: ¿Cuál es la moral? ¿A quién le conviene más la estabilidad institucional democrática de la nación, a los pobres o a los que más tienen?”.
Consideró importante que haya un Estado de derecho en el país, donde “quienes más tienen que garantizarlo son aquellos que tienen más que perder».
Recordó las circunstancias en que llegó al TC, que “no fue por una voluntad determinada sino fruto de una circunstancia política vivida”.
Refirió que fue votado por los tres principales partidos principales del sistema: el Revolucionario Moderno, de la Liberación Dominicana y Fuerza del Pueblo.